Descubriendo los Secretos de la Preparación de Aves en la Prehistoria: Un Estudio Pionero

La arqueología nos permite viajar en el tiempo y descubrir cómo vivían nuestros antepasados. Un reciente estudio publicado en Frontiers in Environmental Archaeology ha arrojado luz sobre las técnicas de preparación de aves utilizadas por los primeros humanos. Este artículo profundiza en los hallazgos de este estudio pionero, explorando cómo se modificaban y rompían los huesos de las aves, y qué nos dice esto sobre las prácticas alimenticias de los Neandertales.

La Importancia del Estudio

La preparación de alimentos es una actividad fundamental en la vida humana. Entender cómo nuestros antepasados procesaban las aves nos proporciona valiosa información sobre su dieta, habilidades y cultura. Este estudio piloto se centra en las diferencias entre aves crudas y asadas, analizando las marcas en los huesos y los patrones de rotura.

Metodología del Estudio

Los investigadores llevaron a cabo experimentos replicando la preparación de aves tanto crudas como asadas. Utilizaron herramientas de piedra para cortar y desarticular las aves, y luego analizaron los huesos para identificar marcas de corte, quemaduras y fracturas. Este enfoque experimental permite una comparación directa con los restos arqueológicos.

(Tabla 1Material complementario 1). Los especímenes de aves se dejaron descongelar 24 horas antes del inicio de la experimentación para que los cadáveres pudieran parecerse a su estado bruto y apariencia originales.

Tabla 1. Resumen de los especímenes de aves utilizados en el estudio experimental, detallando el nombre de la especie, los identificadores correspondientes del centro de rehabilitación (CERVAS), la fecha de muerte, las medidas físicas (longitud corporal y envergadura), el estado de conservación en el momento del estudio, las acciones de procesamiento realizadas y la duración de cada experimento, y las observaciones adicionales observadas antes y durante el procedimiento experimental.

Hallazgos Clave

  1. Aves Crudas:
    • Mayor cantidad de marcas de corte.
    • Fracturas manuales evidentes.
    • Indicaciones de desarticulación manual.
  2. Aves Asadas:
    • Ausencia de marcas de corte.
    • Quemaduras localizadas en áreas específicas.
    • Mayor pérdida ósea debido al calor.

Estos hallazgos sugieren que los Neandertales tenían un conocimiento sofisticado de la preparación de alimentos, adaptando sus técnicas según el tipo de cocción.

Figura 1(A) Alteraciones térmicas e impacto de la exposición al calor en los huesos de las alas después de la exposición experimental al calor de tres especímenes de aves, Streptopelia decaocto, Corvus corone y Columba palumbus(B) Alteraciones térmicas e impacto de la exposición al calor en los huesos de las patas después de la exposición experimental al calor de tres especímenes de aves, Streptopelia decaocto, Corvus corone y Columba palumbus.

Implicaciones para la Arqueología

Este estudio proporciona una base para reconocer la manipulación humana de huesos de aves en contextos arqueológicos. Al identificar patrones específicos de modificación ósea, los arqueólogos pueden inferir prácticas alimenticias y culturales de los Neandertales. Esto nos ayuda a construir una imagen más completa de su vida diaria y sus habilidades.

Figura 2(A) Modificaciones de la superficie ósea en el esqueleto apendicular de Streptopelia decaocto después de haber sido procesado experimentalmente sin cocinar. Las ilustraciones no están dibujadas a escala y deben interpretarse como bocetos conceptuales; No son adecuados para la identificación de especies. A – Escápula derecha (lado lateral): marcas de corte. B – Coracoide izquierdo (cara dorsal): marcas de corte. C – Coracoide derecho (cara dorsal): marcas de corte. D – Coracoide derecho (lado medial): marcas de corte. E – Coracoide derecho (lado ventral): marcas de corte. F – Húmero izquierdo (cara posterior): muescas. G – Húmero izquierdo (cara anterior): marcas de corte. H – Húmero derecho (cara posterior): marcas de corte. I – Cúbito izquierdo (cara anterior): marca de desgarro. J – Cúbito izquierdo (lado medial): marcas de corte. K – Cúbito derecho (lado medial): marcas de corte. L – Cúbito derecho (cara anterior): marcas de desgarro y corte. M – Radio izquierdo (lado medial): marcas de corte. N – Fémur izquierdo (lado craneal): marcas de corte. O – Fémur derecho (lado craneal): marcas de corte. P – Fémur derecho (lado caudal): marcas de corte. (B) Modificaciones de la superficie ósea en el esqueleto apendicular de Corvus corone después de ser procesado experimentalmente sin cocinar. Las ilustraciones no están dibujadas a escala y deben interpretarse como bocetos conceptuales; No son adecuados para la identificación de especies. A – Escápula izquierda (lateral): marcas de corte. B – Escápula derecha (lateral): marcas de corte. C – Coracoide derecho (cara dorsal): marcas de corte. D – Húmero derecho (cara posterior): marca de aplastamiento. E – Cúbito derecho (lado lateral): marca de desgarro. F – Cúbito derecho (cara anterior): marcas de corte. G – Radio derecho (lado lateral): marca de desgarro. H – Tibiotarso izquierdo (lado caudal): marcas de corte. I – Tibiotarso derecho (lado caudal): marcas de corte. J – Fémur derecho (lado caudal): marcas de corte. K – Falange 1 del dígito mayor derecho: marca de corte.

Conclusiones

La investigación sobre la preparación de aves en la prehistoria nos ofrece una ventana fascinante al pasado. Los hallazgos de este estudio pionero no solo amplían nuestro conocimiento sobre las técnicas culinarias de los Neandertales, sino que también destacan la importancia de la experimentación en arqueología. A medida que continuamos explorando y descubriendo, cada nuevo hallazgo nos acerca más a entender la complejidad y la riqueza de la vida de nuestros antepasados.

Tabla 2. Modificaciones de la superficie ósea de los cinco especímenes de aves después del procesamiento experimental.
Este estudio piloto revela algunos patrones iniciales en relación con el procesamiento de los restos de aves que tienen que ver con las interpretaciones arqueológicas de conjuntos similares.
Figura 3. Patrones microscópicos de uso-desgaste en una lasca de sílex después de un procesamiento experimental. La imagen destaca las cicatrices y el pulido distribuidos a lo largo del borde usado de la lasca de sílex experimental, visibles a bajo aumento utilizando un microscopio digital Hirox HR500E (a, b). Detalles del mismo pulido a gran aumento (200x) utilizando un microscopio óptico Olympus BX60 (c, d).

Referencias

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